60 alumnos, en grupos de 14, se inician o amplian sus conocimientos de informática a través de los talleres que Cruz Roja organiza durante todo el año y que ahora se extenderán a otros puntos de la ciudad
Cruz Roja forma a los mayores de la ciudad en la utilización del ordenador y la conexión segura a internet a través de talleres, de 14 alumnos, 60 en total, que acaban los cursos perdiendo el miedo a la pantalla y abriendo las puertas al mundo que los une con sus seres queridos y con ‘viajes virtuales’ por la red.
Durante la primera sesión de este taller formativo el profesor, Alfonso Pasalobos, realizó una rápida evaluación de los conocimientos de los asistentes con el objetivo de adecuar el contenido de las clases al nivel general de todos los participantes y a partir de ahí, a trabajar.
“Llevo dos meses trabajando con los mayores en Cruz Roja, comencé con expectativas y con miedo pero son los mejores alumnos que he tenido, es una experiencia que merece la pena. Trabajar con mayores es increíble, los mejores alumnos. Yo lo que pretendo es que aprendan a manejar el ordenador”.
Otro de los objetivos que se pretende alcanzar con este taller es ofrecer un espectro de participación social a las personas de la tercera edad, a través de los sistemas modernos de información y comunicación, descubriendo otra forma de ocio y participación. Más allá, Óscar Esteban Argüello, responsable del Espacio Mayores explicaba que “están trabajando para ampliar la oferta y colaborar con los centros cívicos para extender la formación hacia todos los barrios de la ciudad. alumnos. María Teresa Pérez, Pedro Yenes, Miguel Hernández, Vicente Prieto, Isidoro Toral y Domingo Alonso son algunos de los estudiantes de informática.
Pertenecen al grupo de segundo curso. “Estamos aprendiendo mucho, y cosas útiles. Al comienzo teníamos respeto, al profesor y al ordenador, pero en seguida cogimos la marcha”, explicaban. “No sólo abrimos el mundo a través del ordenador, también nos acerca a nuestros hijos y nietos. Nos hablamos por internet o nos ayudan para que aprendamos. Son nuestro soporte en casa”, explicaba uno de los alumnos, ante el asentimiento del resto a sus palabras. A esto María Teresa añadía “esto es también algo más que aprender.
Venir a la sede de Cruz Roja, animarnos entre nosotros, reirnos y disfrutar de los compañeros… Esto es TODO en su conjunto, no el hecho de aprender a manejar la máquina. Qué también”. “Aprovecho el ordenador para ver la prensa y enterarme de las noticias, mandar e-mails, escribir alguna cosa… Vamos poco a poco”, concluían.