La Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) denunció el pasado 16 de enero que la discriminación por edad continúa siendo un grave problema en el mercado laboral español. Según datos de diciembre de 2024 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, un 58% de los desempleados supera los 45 años, una situación que afecta de forma especial a las mujeres, quienes representan el 60% del total de parados.
El presidente de CEOMA, José Luis Fernández Santillana, atribuye esta realidad a la preferencia empresarial por perfiles jóvenes, bajo la creencia de que poseen mayor adaptabilidad y competencias actualizadas. Sin embargo, destacó que los trabajadores mayores cuentan con una valiosa experiencia que a menudo se infravalora, lo que no solo afecta a su situación económica, sino también a su bienestar emocional, generando problemas como ansiedad o depresión.
La situación es particularmente preocupante en el caso de las mujeres mayores de 50 años, quienes enfrentan mayores dificultades para acceder al empleo. Según CEOMA, para este grupo encontrar trabajo se ha convertido prácticamente en una misión imposible, debido a los estereotipos y la falta de políticas inclusivas.
Fernández Santillana ha pedido a las administraciones y empresas que impulsen medidas que garanticen la igualdad de oportunidades para los trabajadores mayores, destacando la importancia de promover su actualización profesional, facilitar la transferencia de conocimientos entre generaciones y sensibilizar a la sociedad sobre los beneficios de una fuerza laboral diversa.
Con más de 800.000 socios en toda España, CEOMA sigue trabajando para defender los derechos de las personas mayores, alertando sobre la necesidad urgente de abordar esta discriminación que perpetúa la exclusión laboral en un sector vital de la población.
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