La edad ha dejado de ser una barrera determinante para acceder a una hipoteca en España. La demanda de financiación para la compra de vivienda por parte de personas mayores de 45 años ha aumentado un 25 % en el último año, pasando de representar el 20 % del total de solicitudes en 2024 a alcanzar ya una de cada cuatro (25 %) en 2025, según el análisis de Gibobs.com, startup especializada en asesoramiento hipotecario gratuito.
Los mayores de 45 años ganan protagonismo
Los solicitantes de entre 45 y 55 años concentran el 20 % del total de solicitudes, mientras que los de entre 55 y 65 años suponen el 5 %. Según Jorge González-Iglesias Baeza, CEO de Gibobs.com, “aunque no existen hipotecas específicas para mayores de 45 años, los bancos valoran muy positivamente la solvencia y el historial financiero de este perfil. La particularidad es que se ajusta el plazo de amortización para que el préstamo venza antes de que el titular cumpla los 70 o 75 años, lo que puede implicar cuotas mensuales más elevadas”.
Hipotecas destinadas a primera vivienda
El 78 % de las hipotecas solicitadas por mayores de 45 años tienen como objetivo la compra de una primera vivienda, frente al 11 % que busca una segunda residencia y otro 11 % que lo hace como inversión.
En cuanto al tipo de propiedad, el 85 % de las solicitudes se destinan a viviendas de segunda mano, una tendencia relacionada con la escasez de oferta de obra nueva y el incremento de precios en el mercado inmobiliario.
Aumento del importe medio del préstamo
El precio medio de las viviendas para las que los mayores de 45 años solicitaron una hipoteca en 2025 asciende a 246.670 €, un 4 % más que el año anterior (237.239 €).
En consecuencia, el importe medio del préstamo hipotecario solicitado por este grupo se sitúa en 187.750 €, lo que representa un incremento del 11 % respecto a 2024. Los mayores de 45 años destinan, de media, el 19 % de sus ingresos mensuales al pago de la hipoteca.
Factores que influyen en las condiciones
La edad condiciona la duración de los préstamos, ya que las entidades financieras suelen fijar como límite que la hipoteca finalice antes de que el titular cumpla los 70 o 75 años. Este factor reduce el plazo de amortización y eleva las cuotas mensuales.
“Elegir entre una hipoteca a tipo fijo o variable es una de las decisiones más relevantes al financiar una vivienda. A partir de los 45 años, la previsibilidad y la estabilidad son fundamentales”, explica el CEO de Gibobs.com.
Distribución regional
Por comunidades autónomas, Cataluña, Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana concentran la mayor parte de solicitudes de hipotecas por parte de mayores de 45 años, con un 23 %, 17 %, 15 % y 13 %, respectivamente.
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