POr M.J. SALVADOR
ZAMORA
En un esfuerzo por promover la vida activa entre las personas mayores de 65 años, se presentaron en Zamora los talleres de ‘Vida Activa’. Están dirigidos especialmente a la población mayor de la provincia y tienen como objetivo proporcionarles recursos para mantener una vida activa y autónoma.
Es por tanto que el Ayuntamiento de Zamora, a través de la concejalía de Servicios Sociales, ha puesto en marcha la edición de este año del programa “Vida Activa”, con una serie de actividades para mayores de 65 años en los que podrán ejercitar varias facetas de la vida, ya sea la memoria, las habilidades físicas o las tecnológicas.
En la presentación de este programa, Auxi Fernández, concejala de Servicios Sociales, reconoció “el trabajo del equipo de Animadores Comunitarios de los Centros de Acción Social (CEAS) del Ayuntamiento y de las entidades sociales del tercer sector, así como empresas de la ciudad”, ya que “sin ellos esto no sería posible”. En este sentido, destacó también la necesidad de este tipo de programa ya que sus actividades son “una oportunidad de volver a los espacios comunitarios y construir vínculos, algo muy necesario a todas las edades e imprescindible con el paso de los años”.
Durante la presentación de los talleres estuvieron acompañando a la concejala los responsables de Cruz Roja, AFA Zamora, Fundación INTRAS y Academia Cátedra, que son algunos de los colectivos y empresas de la capital que van a impartirlos.
Las temáticas de las actividades van desde Informática básica a Pilates, pasando por varias acciones referentes a la memoria y al conocimiento de uno mismo y de otras culturas. Precisamente, los destinatarios de este programa son personas con 65 años o más.
Talleres Precisamente, todos los responsables de los cursos estuvieron presentes para poder explicar en que consistían sus programaciones. En este sentido, desde la Academia Cátedra se van a dar los talleres de móviles y de informática “se van a impartir tres porque es un taller que tiene bastante demanda y además el número de participantes de móviles, es más reducido debido, a que es una atención más individualizada, aunque bueno siempre fomentamos un poco el enfoque participativo del grupo”. Los participantes serán 10 y se desarrollará hasta el mes de mayo. Los talleres de informática son dos, uno básico y otro más avanzado con 15 participantes cada uno de ellos.
Desde la Fundación INTRAS, su director Adrián Pérez, habló de los talleres que van a llevar a cabo y que tienen que ver con “la memoria maleta” que se enfoca a fortalecer la memoria mediante actividades cognitivas específicas, el uso de reglas nemotécnicas y estrategias para manejar los olvidos cotidianos. Se llevará a cabo en el Museo Etnográfico en las mañanas de los martes y los viernes de 12 a 1:30 y el taller de memoria recuerdos que se basa en el trabajo de la memoria autobiográfica de la persona y de sus recuerdos significativos se impartirá también en el Museo Etnográfico en las tardes de martes y jueves de 4:30 a 6.
Por otra parte, el responsable del programa de personas mayores con discapacidad y cuidadoras de Cruz Roja de Zamora, Luis Carlos Huete, recordó como desde esta institución se están llevando a cabo talleres relacionados con las Culturas del Mundo y en los últimos ejercicios con Tradiciones. Según, Huete “venimos trabajando sobre todo el tema de costumbres y tradiciones por un lado las propias de los mayores que viven en Zamora y, por otro lado, lo que intentamos es romper un poco con los estereotipos y con las ideas preconcebidas que se tienen de otras culturas y de otras nacionalidades que, a veces, desde el desconocimiento genera un cierto rechazo o un cierto malestar, hablamos de gente de Sudamérica, del continente africano o de países de Europa del Este”. Además señala que “trabajamos distintas costumbres y tradiciones pero nos damos cuenta que realmente al final somos más parecidos de lo que creemos con estas culturas”. En el curso pueden participar unas 40 personas.
Por último, desde la Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos de Alzheimer de Zamora (AFA) imparten el taller de “Orgullo de ser Mayor”. Su terapeuta ocupacional, Álvaro Ávila dijo que “con este lema lo que queremos transmitir es literalmente eso, sentirnos orgullosos y satisfechos, tengamos la edad que tengamos, y que sepamos aprovechar las oportunidades que nos da la vida en cualquier etapa de ella”. El programa se desarrolla a lo largo de 16 sesiones a lo largo de dos días. El número de plazas es para 20 personas.
PERDER EL MIEDO La concejala de Servicios Sociales presentó uno de los talleres de Vida Activa a los que se apuntaron algunas personas. Recordó que Zamora “cuenta con una gran población mayor no solo en la provincia sino en la ciudad y es por ello que tenemos que seguir proporcionándoles recursos en su vida para que esta siga siendo activa y sobre todo para darle el protagonismo que necesita una generación que ha dado todo por este país que nos han ayudado a ser los que somos”. En este sentido, señaló también que “las instituciones tenemos la obligación de devolvérselo dándole una buena calidad de vida y la posibilidad de que tengan un envejecimiento que no sea como partimos ahora, ni de inutilidad ni de no poder hacer las cosas, tienen mucha vida por delante y pueden tener muchos proyectos”.
Precisamente, en el salón de actos del Seminario San Atilano se llevó a cabo la presentación de una charla a un numeroso público que acudió para conocer como usar los cajeros y perder así “el miedo a las nuevas tecnologías”. Los encargados de llevarlo a cabo fueron Liliana Amaya y Vicente Caballero. Ellos están trabajando en colaboración con la Universidad de Salamanca en un programa de realidad virtual.
Estos dos expertos explicaron la forma en la que se puede mejorar la calidad de la vida de las personas mayores pero sobre todo “intentar que esa autonomía de independencia se mantenga”. En este sentido, Liliana Amaya señaló que este proyecto “tiene esa naturaleza, queremos que los mayores no se queden atrás y que puedan tener esa competencia digital y tengan la posibilidad de aproximarse a un cajero automático de la banca para poder realizar las operaciones que ellos requieran con toda confianza”. “En realidad es algo divertido y novedoso para ellos y, además, a nivel sensorial es positivo, puesto que afianzan esta actividad, ya que practican en un entorno seguro, que ellos pueden controlar. Los que han probado quieren continuar y son muchos los que, encantados, aseguran que se lo tienen que contar a sus nietos, queriendo compartir así lo que han conseguido”, dice Amaya.
Estas dos personas llevaron a cabo un exhibición mediante lo que es un cajero de realidad virtual. Vicente Caballero señaló que “en un ambiente totalmente inmersivo una persona con una gafa de realidad virtual va a poder, como si tuviera un cajero enfrente, realizar todas las operaciones bancarias como retirar o ingresar dinero y hacer alguna que otra operación, en este sentido la propia persona va a poder experimentar y desarrollar su propia competencia digital que la tiene todo el mundo, grandes y pequeños. La brecha digital será menos con formación y este tipo de acciones complementarias. En realidad el objetivo es mejorar la vida de los mayores e intentar que mantengan su autonomía e independencia, sin que se queden atrás por tanta tecnología”. “La práctica con este programa es una forma amena de aprender. Tendrán más o menos dificultades a la hora de enfrentarse a un dispositivo tecnológico, pero, aunque no le pierdan el respeto, sí le habrán perdido el miedo”, subraya Liliana Amaya.
A pesar de los desafíos que enfrentan las personas mayores que viven en áreas rurales sin acceso fácil a cajeros automáticos, los talleres ofrecen una oportunidad invaluable para desarrollar habilidades tecnológicas que pueden aplicarse en diversas situaciones.
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